Jesús Alberto Rubio
Tres estudiantes de las universidades de Guadalajara y Morelia, Michoacán, así como de esta casa de estudios, calificaron como muy gratificante y pleno en una riqueza de aprendizaje el haber participado en el proyecto Tanatoecología nocturna de carreteras de Sonora, una actividad que se enmarcó en lo que fue el reciente Verano de la Investigación Científica del programa Delfín que se desarrolló recientemente en la Universidad de Sonora.
Los estudiantes son Adriana Quiñones Ley, de la maestría en Biociencias del Dictus; Brianda Lucero Flores Padilla, de la Licenciatura en Gestión y Economía Ambiental de la Universidad de Guadalajara, así como Manuel Guillen Montañez, de la carrera de Ecología y Medio Ambiente, de la Universidad Montrer, en Morelia, Michoacán.
Acompañados de Alf Enrique Meling López, profesor del Departamento de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de la Universidad de Sonora (Dictus, fueron entrevistados en el programa A ciencia cierta que produce la Dirección de Vinculación y Difusión y que se transmite por Radio Universidad.
En la edición conducida por Narciso Navarro Gómez, afirmaron que resultó muy importante en su formación universitaria el haberse incorporado al proyecto por las diversas actividades realizadas a través de prácticas guiadas de campo frente a la diversidad de flora y fauna sonorense.
Al resaltar el objetivo de estimar la tasa de mortalidad de la fauna ocasionada por el tráfico vehicular en carreteras de Sonora, cada uno señaló la importancia de hacer un análisis sobre ese tema.
“No entendemos el comportamiento humano –como parte que es de la misma naturaleza de nuestro alrededor–, sobre todo en una entidad con gran riqueza en flora y fauna, la que no debemos de destruir como es el caso del factor tráfico vehicular carretero”, reiteraron.
Junto con Alf Meling, coincidieron en afirmar sobre la importancia que tiene el cuidado de las especies dejando ser depredadores “en cuatro llantas”, respetando señalamientos y la velocidad del vehículo ante la posibilidad de la presencia de animales sobre esas rúas.
“La ecología de carreteras no sólo es tirar basura sobre ellas, sino que ésta juega un papel importante en la vida de las especies porque muchos piensan que matar un animal es un juego “y no pasa nada”, advirtieron.
Peligro: cambio climático
Meling López, destacó que los conceptos de educación ambiental y la conservación de las especies son vitales para la vida humana y el planeta. “Hoy, recordemos, cómo nos acercamos al peligro del cambio climático global, teniendo al menos con once años para amortiguar lo que está sucediendo, de ahí que debamos tomar conciencia sobre la amenaza que se cierne sobre el planeta”, alertó
El investigador especialista en el área de ecología vegetal, costera y marina, mencionó que el tema sobre ecología de carreteras se trabaja en la entidad con mucho énfasis desde hace tres décadas, “un asunto que ante las altas tasas de mortalidad anuales de felinos e insectos se ha agudizado en los últimos años por la falta de conciencia ambiental de la gente”.
Programa Delfín
Alf Meling López recordó que el programa Delfín se desarrolló del 25 de mayo al 3 de julio pasado, cuyo objetivo fue una vez más fomentar la investigación y cultura científica de jóvenes con talento y vocación por la ciencia y la tecnología.
“Lo que se busca es una formación de capital intelectual de alto nivel académico, que en el futuro inmediato contribuyan en el desarrollo regional, nacional e internacional”, sostuvo.
Además, calificó de muy importante la participación de los docentes en la formación de los estudiantes que se incorporan a ese programa porque tienen la oportunidad de orientarlos hacia el estudio de posgrados –como es el caso de la biología–, con interacción y procesos de actualización académica y tecnológica más allá del aula.